Si pasáis por la provincia de Cáceres os propongo una paraita que seguro no os defraudara. Antes de llegar a Trujillo, dirección a Madrid, me detuve en un rincón lleno de historia, un lugar de encantos naturales que vive entre grandes recuerdos históricos.
Antes de iniciar mi visita, me documente de su pasado que por cierto es bastante amplio. Existen datos de Sta. Cruz de la Sierra desde el año 828. Por este bello paraje han pasado civilizaciones como la Celtibera, Lusitana, Vetonas, Árabes y Romanas. También existen vestigios de los visigodos.
Las fotografías muestran la riqueza y el pasado esplendoroso que debió tener este pueblo.
Desde lejos se divisa el pueblo al pie de la Sierra, predominando entre la población la ruinas de un antiguo Convento Agustino del S.XVII y una Iglesia de estilo barroco.
No tuve tiempo de introducirme en su interior pero aun se conservan varias pinturas murales y una pequeña imagen de 1700 de granito que representa a San Agustín. El abandono que sufre este edificio
Entrando por la calle de Nuflo de Chaves ( explorador y conquistador español del Paraguay y Bolivia, nacido aquí en 1518), llegamos hasta la Plaza Mayor.
Rodeado de arcos y casas señoriales, en un costado me encuentro con la Iglesia de la Vera-.Cruz. El lateral que pega a la plaza está precedido de un pórtico de siete arcos de medio punto. El templo puede datarse en los inicios del s. XVI. La puerta de la epístola y el pórtico lateral mencionado en los inicios del s. XVII. Vaya una joya.
Es una gozada darse un paseo por sus calles, se respira una tranquilidad total. En la misma plaza encontramos un mesón y un bar casi frente por frente y además en el pueblo existe casas rurales. Sus alrededores son bellezas naturales, llenas de senderos empedrados que trepan por la falda de su Sierra, donde aún existen restos de un viejo castillo en la cima. Bonito lugar señores !!!!!!
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